Seguro de garantía (W&I Insurance) ‒ ámbito de aplicación del seguro
La póliza de un seguro de garantía se asemeja a la estructura de un contrato de compraventa de empresa y, al igual que éste, es negociable individualmente. La póliza está vinculada a las garantías y las consecuencias en caso de su incumplimiento establecidas en el contrato de compraventa. En la práctica transaccional, el seguro de garantía rara vez cubre todos los riesgos derivados del contrato de compraventa de la empresa. El denominado “warranty spreadsheet” establece qué garantías e indemnizaciones asumidas por el vendedor están aseguradas y en qué medida.
Los riesgos derivados de un ajuste del precio de compraventa se excluyen típicamente de la cobertura del seguro. Por una parte, esto se refiere a la determinación del precio de compraventa final sobre la base de un balance de situación a la fecha del closing. Las desviaciones entre el precio provisional acordado en el momento de la firma del contrato y el precio final no suelen estar aseguradas. Por otro lado, esto afecta a los acuerdos tipo “locked box”, en los que el precio final se determina sobre la base de las últimas cuentas anuales y, por tanto, ya está fijado a la hora de la firma del contrato. En este caso, el vendedor debe garantizar que no se han producido retiradas en efectivo o medidas parecidas en el periodo entre la fecha del cierre de las cuentas anuales y la fecha de la firma del contrato. Estas garantías también quedan excluidas de la póliza.
Asimismo, el seguro de garantía tampoco cubre los riesgos conocidos por el beneficiado del seguro en el momento de la firma de la póliza. Dado que el comprador debe revelar los informes de due diligencia a la entidad aseguradora en el caso de la póliza de seguro del comprador, esto puede tener como consecuencia la exclusión de todos los riesgos identificados en el marco de la due diligencia. Las garantías relacionadas con el futuro tampoco son asegurables. Por último, se excluyen de la cobertura del seguro las áreas de garantías que no han sido objeto de verificación en la transacción concreta.
Además, quedan a menudo acordadas en la póliza desviaciones de las garantías establecidas entre el vendedor y el comprador. De esto modo, las garantías pueden sufrir limitaciones. Ello se puede llevar a cabo introduciendo un umbral económico de responsabilidad o limitando la cobertura del seguro al leal saber del vendedor. Sin embargo, también ocurre que el ámbito de responsabilidad del seguro va más allá de las garantías acordadas. Esto puede afectar, por ejemplo, los daños y perjuicios a indemnizar en la medida en que la compañía de seguros se compromete a indemnizar por unos daños y perjuicios superiores a lo establecido en el contrato de compraventa.
La suma asegurada suele corresponder al importe máximo habitual de responsabilidad en caso de un incumplimiento de las garantías operativas. En la práctica, suele corresponder entre el 10 % y el 50 % del volumen de la transacción. Las franquicias son bastante infrecuentes hoy en día.