Estrategias autoefectivas para afrontar procedimientos excesivamente largos | LEX | La Plataforma Jurídica Hispano-Alemana de Referencia Pasar al contenido principal

Estrategias autoefectivas para afrontar procedimientos excesivamente largos

30/06/2023
| Dr. Thomas Rinne, Johannes Brand. LL.M.
Selbstwirksame Strategien für den Umgang mit überlangen Verfahrensdauern

La duración de los procedimientos judiciales en Alemania es cada vez mayor. En 2012 la media era de 8,2 meses, en 2021 era ya de 11,4 meses. En el último número de la Newsletter Derecho & Impuestos informábamos de una propuesta del grupo parlamentario de la CDU en el Bundestag que sugería un cambio estructural. Examinamos críticamente estas propuestas, pero al mismo tiempo hicimos hincapié en que la creciente duración de los procedimientos exige también reacciones políticas.

Al mismo tiempo, los clientes esperan respuestas de sus abogados, y con razón. No basta con quejarse de la sobrecarga de los tribunales y encogerse de hombros. Los abogados también tienen que proporcionar sus propias respuestas a sus clientes y éstas casi siempre consistirán en evitar los litigios, pues éstos conllevan tiempo, dinero y estrés.

Las medidas autorresponsables empiezan ya en la redacción del contrato. Quien sabe que un procedimiento judicial posterior le llevará años y le costará decenas de miles de euros con un resultado incierto, pondrá más empeño en la redacción del contrato y se mostrará más inclinado a buscar el apoyo de expertos. Las disposiciones claras evitan los litigios.

Sin embargo, la autoeficacia es importante en las fases posteriores del desarrollo del conflicto. Los conflictos rara vez surgen de la noche a la mañana, sino que suelen desarrollarse a lo largo de un periodo de tiempo más prolongado. Mantener conversaciones abiertas en una fase temprana evita un agravamiento del conflicto. También en este caso ayuda recibir apoyo profesional a tiempo.

Las técnicas de negociación son cada vez más importantes en este ámbito. Los abogados formados en técnicas de negociación logran el difícil equilibrio de representar los intereses de su propio cliente en el exterior y, al mismo tiempo, ofrecer a su propio cliente una imagen realista de un posible proceso judicial. A menudo, los clientes tienden a precipitarse en los procedimientos judiciales sin ninguna necesidad, lo que al final sólo les conlleva perjuicios (véase más arriba). Los malos abogados son innecesariamente agresivos y empujan a sus clientes aún más a esos procedimientos. Los buenos abogados protegen a sus clientes de esto, ponen todo de su parte para llegar a un acuerdo extrajudicial y tienen las habilidades necesarias para ello.

Por último, pero no por ello menos importante, los procedimientos formales dirigidos a la resolución de conflictos al margen de los procedimientos judiciales "normales" también ayudan. Los propios tribunales ofrecen procedimientos de mediación con este fin, que no suponen ningún coste adicional a las costas judiciales. Los procedimientos de arbitraje pueden ser útiles, especialmente en litigios internacionales, pero deben estipularse contractualmente desde el principio.

Quejarse no ayuda. Quienes comprendan que los procedimientos judiciales conllevan tiempo, dinero y estrés resolverán los conflictos de otra manera e invertirán su energía donde es más útil: en los negocios.

Categoría:

¿Le ha gustado este artículo?

¡Compártalo en sus redes!